Nicaragua instó hoy a El Salvador a deponer «el uso de la fuerza» en una zona marítima reclamada por ambos países y lo invitó a resolver su «presunta disputa» ante la Corte Interamericana de Justicia (CIJ).
Lo hizo un día después de que la Cancillería salvadoreña rechazara haber incursionado en aguas nicaragüenses y afirmara que las mismas están bajo su «soberanía».
«Si el Gobierno de El Salvador realmente considera que existe una disputa de límites, le hacemos un llamado para que cese de recurrir a la amenaza o al uso de la fuerza contra la integridad territorial de Nicaragua y someta la presunta disputa ante la CIJ», declaró Nicaragua en un comunicado emitido en Managua, la capital.
«Con estas acciones, lo que El Salvador verdaderamente pretende es ponerle fin violentamente al tratado de límites entre Nicaragua y Honduras -que suscribió bilateralmente con Honduras el 27 de octubre de 2021, que incluye el Golfo de Fonseca, que comparten los tres países-«, señaló el Gobierno de Managua, en una nueva declaración.
Según el Ejecutivo, desde el 5 de febrero a la fecha- El Salvador «ha enviado buques militares artillados a los espacios marítimos de Nicaragua en el Océano Pacífico» y aseguró que «los buques militares salvadoreños han incursionado a menos de 30 millas de distancia de nuestras costas y permanecen en dicho sitio reclamando soberanía sobre dichos espacios marítimos».
«Nicaragua desea enfatizar que estos espacios siempre han estado bajo soberanía indiscutible de Nicaragua y que El Salvador nunca ha pretendido ni reclamado soberanía en los mismos», agregó.
El Ejecutivo nicaragüense afirmó que «previo a las acciones hostiles que están siendo ejecutadas por parte de El Salvador, no existía ni existe documento alguno en que El Salvador haya reclamado soberanía sobre esos espacios ni registro alguno de que haya incursionado en esa zona, tal como lo está haciendo actualmente».
«Históricamente, la posición de El Salvador siempre ha sido y continúa siendo que la República de Honduras no tiene derecho en la boca del Golfo de Fonseca y por ende tampoco en las aguas afuera del mismo en el Océano Pacífico», recordó Managua.
«Precisamente por esa posición intransigente de El Salvador con la hermana República de Honduras es que Nicaragua suscribió a nivel bilateral el llamado Tratado de Límites entre la República de Nicaragua y la República de Honduras en el Mar Caribe y Aguas fuera del Golfo de Fonseca el 27 de octubre de 2021», añadió.
Nicaragua y Honduras firmaron un tratado de límites en el Pacífico, incluyendo el Golfo de Fonseca que comparten con El Salvador, este último ausente de la firma.
El Salvador y Honduras disputan desde hace varios años la soberanía de isla Conejo en el Golfo de Fonseca, un peñón de menos de un kilómetro cuadrado, aunque las últimas controversias surgieron cuando el Ejército hondureño realizó un acto e izó su bandera.
Con ese tratado, Nicaragua reconoció que su frontera marítima en el Golfo de Fonseca con Honduras, ratificando de esta forma el fallo dictado en 1992 por la Corte Interamericana de Justicia (CIJ).
«Con la firma de este tratado, Nicaragua puso lo necesario de su parte para que el hermano pueblo hondureño obtuviera su merecido derecho a una parte de esas aguas; un derecho que ya la misma Corte Internacional de Justicia le había reconocido y que El Salvador hasta el día de hoy se niega a reconocerle», insistió Managua.
«Esta invasión de El Salvador en los espacios marítimos de Nicaragua a menos de 30 millas de nuestra costa continental no se debe a ninguna disputa territorial con Nicaragua en una zona que nunca ha reclamado, sino que es un gesto de rechazo a la invitación del tratado para mantener esos espacios como zonas de paz», expresó Managua.
Nicaragua dijo que las acciones tomadas por su Fuerza Naval «son y han sido en territorio propio y en resguardo de su soberanía e integridad territorial», y que sus soldados se encuentran «manejando la situación con firmeza y prudencia, y en fiel cumplimiento a las normas internacionales».
El Salvador rechazó la acusación
La acusación fue rechazada por la Cancillería salvadoreña, que consideró dicho espacio marítimo como propio.
«Me refiero a su nota de fecha 6 de febrero de 2022 que manifiesta la supuesta -y no cierta- incursión naval de buques salvadoreños en espacios marítimos que Nicaragua erróneamente pretende como suyos», expresó la canciller salvadoreña, Alexandra Hill, en una nota dirigida a su par nicaragüense, Denis Moncada.
En su mensaje, Hill tachó de «inaceptable la línea de argumentación» que Nicaragua utiliza «para justificar una evidente violación a la soberanía de El Salvador» y «por intentar crear una inexistente percepción de actitud provocativa de parte de la Fuerza Naval».
Ante la escalada entre ambos países, diputados salvadoreños solicitaron al Gobierno de Nayib Bukele enfocarse en los problemas internos y no meterse en problemas internacionales.
La diputada Claudia Ortiz, del partido opositor Vamos, afirmó: «El Salvador debe cuidar sus relaciones diplomáticas, ya que tenemos suficientes problemas al interior del país: con la pandemia, las crisis institucionales, el tema económico, la inseguridad, como para estar teniendo problemas a nivel internacional», enumeró.
En tanto, el diputado oficialista Romeo Auerbach intentó bajar el tono a la disputa: «Solo hay dos opciones cuando pasa algo así, que quisiéramos hacer algo malo o invadir Nicaragua, pero estoy seguro de que El Salvador no está para hacer presión de que quisiéramos invadir», puntualizó.
Punta Cosigüina forma parte de una península nicaragüense del mismo nombre en el Pacífico que limita con el Golfo de Fonseca, cuyas aguas comparten Nicaragua, Honduras y El Salvador.
El Golfo de Fonseca fue un territorio de disputa histórica entre los tres países y foco de conflicto, lo que provocó detenciones de navegantes cuando se traspasaron los límites entre las naciones.